viernes, 8 de marzo de 2019

El Poder de Grayskull: 35 Aniversario de He-Man

 

Ya en alguna ocasión como días de Navidad o Reyes me había planteado publicar alguna entrada hablando sobre los juguetes de mi infancia aunque al final nunca he acabado por hacerlo. La cosa es que se cumplen 35 años de la llegada de Masters del Universo a España, y parecía una buena ocasión para empezar el contribuir al evento que están llevando a cabo a lo largo de este mes los amigos de Yo tengo el Poder: la historia de los Masters del Universo en España.*

Los juguetes que con más cariño recuerdo de mi infancia fueron los juegos de mesa de Cefa, las figuritas tipo Dunkin que venían en los pastelitos de Cropan y similares, algunos Airgam-Boys y, sobre todo, el juguete que considero que fue con el que mas disfruté, fueron los clicks de Famobil y Playmobil. También hubo un Darth Vader de Kenner, algo de Exin Castillos y de Tente y hasta un Madelman, entre otras muchas cosas sueltas. Insisto, el juguete que más marcó mi infancia fue Playmobil. Pero entonces llegó Masters del Universo que, aunque se quedaría en el segundo puesto de mi ranking, sin duda marcó una parte de mi infancia.

Y es que de los anuncios de juguetes que debí ver de pequeño, solo recuerdo que me impactaran especialmente dos de ellos y uno fue precisamente el primer anuncio de Masters del Universo (el otro, años más tarde, el de Heroquest). Aquellas figuras eran diferentes a las que habíamos conocido hasta entonces. Los personajes realmente tenían el aspecto de ser héroes poderosos, épicos, mitológicos, algo que desde luego no te transmitía un Click, un Airgam Boy o un Madelman, aunque fuera vestido de Superman**. Y estaba esa ambientación en general de fantasía heroica que los anuncios te transmitían. En aquella época no había visto las películas de Conan pero si El Señor de las Bestias (1982), la cual, por cierto, aún prefiero, y en general estaba familiarizado con el género. Lo que aquellas figuras evocaban, ese tipo de fantasía, resultaba simplemente fascinante. Y el castillo era tan… increíble.

Mi primer Master del Universo fue uno como este, Merman
 
He-Man, por ser el personaje protagonista, el héroe, era una figura que debía de tener. Pero tendría que esperar. Y es que desde pequeño los que siempre me han encantado han sido los personajes más fantásticos, los monstruos y cosas así, con lo cual, la primera vez que vi las figuras en una tienda, los ojos se me fueron detrás de los personajes más extraños: Stratos, Mer-Man y Beast Man. Y por supuesto Skeletor. Tuve que esperar hasta mi cumpleaños, o quizás mi santo, y entonces llegó mi primer Master, Mer-Man. El concepto del hombre anfibio, de La Criatura de la Laguna Negra (1954), me resultaba fascinante así que me decidí por él. Me gustó mucho jugar con aquella figura. No sé, por alguna razón, recuerdo particularmente lo extraño que me pareció que la cabeza fuera de goma.

He-Man y Skeletor, el bueno y el malo de la historia.

Meses después se acercaban las navidades, y no recuerdo que pedí aquel año, lo que si recuerdo es que en casa de mi tía los Reyes Magos me iban a dejar un Master del Universo y yo tenía que decidir cual pedir. La cosa estaba entre He-Man y Skeletor… y bueno, ya saben, me gustan los monstruos, He-Man iba a tener que esperar un poco más… pero no. Y es que, si bien en casa de mi tía me dejaron a Skeletor, a He-Man me lo dejaron en casa de mi primo. En realidad, allí me iban a dejar un rifle de mixtos, pero acabaron dejándome también a He-Man. Mi primo en aquella época llevaba el tema de las basuras de un hipermercado que solía tirar cosas que la gente no compraba por pequeños defectos, a veces incluso solo en el embalaje. Estuvo bien, tenía al bueno y al malo, podían luchar por las dos mitades de la espada para ensamblar la que habría paso a Grayskull… aunque no tenía el castillo. Creo que siempre tuve claro que lo más probable es que nunca lo tendría. Era caro. No había tenido el barco pirata de Playmobil y esto no iba a ser una excepción. Pero eso, estuvo bien, tuve tres Masters del Universo en poco tiempo… ejem... mientras un amigo de mi calle que tenía una tía soltera acabó teniendo por lo menos toda la primera tanda. Ese Stratos, ese Beast-Man o ese Battle Cat que me habrían encantado tener.

Point Dread & Talon Fighter que en España se llamó Garra Voladora y Torre de Vigilancia.

Creo que fueron los Reyes del año siguiente cuando pedí la Garra Voladora y Torre de Vigilancia (Point Dread & Talon Fighter). Era una nave con forma de halcón, con una base, la Torre de Vigilancia, que se dividía en dos partes de manera que la parte superior se podía encajar en la torre del… del castillo que nunca iba a tener. En realidad, me pregunto hoy día si había una diferencia muy grande de precio entre la Garra Voladora y el Castillo de Grayskull.  Pero debo confesar que, aunque me encantaba el aspecto exterior del castillo, el aspecto interior no acababa de convencerme, quizás por ello tampoco insistí especialmente. Esos mismos Reyes un primo que vivía en casa de mi abuela me dijo que allí me iban a dejar otro vehículo, el que creo que también pidió para sí mismo, el Carro de Asalto (Battle Ram). Recuerdo que fui a casa de mi abuela, me preguntó ella qué iba a pedir por Reyes, le dije que una nave de los Masters del Universo (pensando en la Garra) y ella me preguntó algo así como si sabía dónde los Reyes me iban a dejar la nave… ella pensando en la otra claro, y yo pensando “se supone que no debo saber que aquí me van a dejar esta otra… ¿o sí?”. Fue muy engorroso, pero es divertido recordarlo ahora con el tiempo. En fin, que aquel año mis tres Masters pudieron enfrentarse los unos con los otros con la Garra Voladora y el Carro de Asalto. Que además molaba mucho porque se separaba en dos partes, una era una especie de cañón antiaéreo y la otra una especie de moto voladora con la cabeza de un dragón o algo así delante. Es una de las cosas estupendas que tenían los Masters del Universo, que, aunque había tecnología en ese mundo de fantasía, solía tener un aspecto muy místico.

El Carro de Asalto. Como me gustaría haber conservado todas estas cosas.

A partir de aquí me es más bien difícil precisar en qué momento llegó cada nueva adquisición. Un cumpleaños o santo me regalaron a Trap Jaw. No sé si fue antes de los Reyes de la Garra Voladora. No recuerdo si llegué a decir que quería un Master del Universo. Probablemente no, porque si lo hubiera hecho habría pedido Beast Man o Stratos. Aunque me da la sensación de que en cuanto salía una nueva hornada de figuras la anterior tendía a desaparecer de las tiendas con lo cual es posible que me viera abrumado por tantas figuras nuevas y haber perdido la posibilidad de tener las que me gustaron primero que simplemente no especifiqué. Volviendo a Trap Jaw, la cosa es que, además, no recuerdo haber jugado a cambiarle los brazos con lo cual o se me perdieron muy pronto o incluso es posible que viniera defectuoso y no los trajera.

En aquella época iba a jugar a casa de un compañero del colegio y tenía cosas chulas como el castillo o Battle Cat o Panthor, la pantera que sacaron como contrapartida para que sirviera de montura a Skeletor. Por cierto, cuando salió Panthor me gustaba más que Battle Cat aunque por un lado no tenía aquella máscara tan chula y por otro el que estuviera recubierto de aquellos pelitos me hacía pensar que probablemente se iba estropear fácilmente. Supongo que de haber pedido uno de los dos, al final me habría decantado por Battle Cat.

Otros dos que tuve. Que casualidad haber encontrado una foto con los dos juntos.

Esto de pensar en las posibilidades de que la figura se estropeara también me pasó cuando tuve la posibilidad de elegir entre Grizzlor y Roboto. Así que al final me decanté por Roboto, pero creo que en aquellos momentos ya estaba un poco desencantado con las figuras, por esto de que iban cambiando y ya no eran como las primeras. Además, Grizzlor era chulo, retomaba el concepto de Beast Man, pero aquel cuerpo peludo no me recordaba al de un Master. Y si, también estaba Moss Man, pero ni quería un muñeco que oliera a algo, ni, por mucho que fueran los mismos moldes, era Beast Man. ¡Lo que puede hacer un cambio de color!


Y mi último Master del Universo fue Modulok, un monstruo que era como dos juntos, tenía cuatro brazos, seis piernas, dos cabezas… y podías montarlo como quisieras. Estaba chulo, quizás eché de menos que tuviera más piezas.

Otra cosa que recuerdo de la época es que los pastelitos de Cropán trajeron muñequitos tipo Dunkin de Masters del Universo. Ahí si podías tener un montón de ellos en miniatura, aunque claro, no era lo mismo, pero resultaba divertido jugar con ellos. Siempre me gustaron los muñequitos de este tipo, de cualquier serie de dibujos, por eso, porque podías tener gran cantidad.

Por cierto, paradójicamente, aquella época en la que jugaba con los Masters del Universo, no conocí los dibujos animados. En casa no teníamos video ni había un canal autonómico que los pusiera así que mi referencia sobre el mundo de Masters del Universo fueron los pocos mini-comics que me llegaron con las figuras.

He-Man, Teela y Duncan (Man at Arms) en la película.

Sobre la película… bueno, está ahí, pero no soy un gran fan de ella y quizás en parte sea “culpa” de la película que vi justamente después. Quería ir al cine a ver la película y se dio el caso de que la pusieron en un programa doble con otra película que un primo mío, mayor que yo, quería ver. Así que fuimos juntos. Lo que no me gustó mucho de la película fue que los personajes se parecían poco a las figuras. A día de hoy sigo pensando que las adaptaciones deberían intentar parecerse a aquello que adaptan. Si, Dolph Lungren parecía He-Man, un poco, aunque también podría haber sido un bárbaro cualquiera. Evil Lynn y Skeletor se parecían algo también, un poco. En el caso de Man At Arms y Teela no se parecían en nada. ¿Y dónde estaban Mer-Man o Battle Cat? De hecho… ¿dónde estaba Eternia? La mayor parte de la película transcurre en la Tierra. Skeletor tiene un montón de ¿Storm Troopers?, hay un enano con orejas puntiagudas que no se sabe muy bien quién es. ¡Y tardé años en confirmar que Beast Man estaba en la película por lo poco que se parecía! Fue un tanto decepcionante. Aun así, podría haber tenido un mejor recuerdo quizás si no fuera, como digo, por la segunda película de aquella sesión doble: La Princesa Prometida (1987). Si la habéis visto, si la conocéis, ya sabéis la gran película que es. Eclipsó completamente a Masters del Universo. Por cierto, casualidades de la vida, el niño interpretado por Fred Savage en esa película tiene algunos Masters en su habitación.

En la habitación de Fred Savage podemos ver a Battle Cat, He-Man, Grizzor, Leech y Spikor. 

Volviendo a los juguetes, pasado un tiempo, creo que ya había dejado de jugar con juguetes, sacaron unos nuevos “He-Man”, tamaño Gi Joe, que definitivamente no eran lo mismo. Mucho más tarde, a principios de los 2000 sacaron una nueva serie de dibujos animados, con unas nuevas figuras, parecidas a las originales, pero tampoco para muchos de nosotros eran lo mismo y al parecer no cuajó en las nuevas generaciones que tenían mucho más donde elegir.

Finalmente, hace unos años descubrí una nueva serie de figuras llamada MOTU Classics. Son figuras más proporcionadas, con más articulaciones, y con los detalles más trabajados, pero basadas en los diseños originales con lo cual son perfectamente reconocibles. Me encanta eso, como respetan los patrones de color por un lado pero por otro pulen los acabados que en las originales quizás estaban un poco descuidados. Son geniales. Eso sí, algo caras, así que aunque me encantaría tener algunas por ahora se escapa de mi presupuesto.

El He-Man de MOTU Classics junto a la figura original.

En fin, un ligero repaso a lo que en mi infancia fueron los Masters del Universo, un juguete que llegó a España hace ya 35 años y que cuando nos ponemos a recordar parece que fue ayer.

* Están preparando un libro que tiene pinta de que va a ser genial ya solo viendo la cantidad de fuentes con las que están contando. Y centrado en lo que fue el fenómeno aquí, en España.
** Tuve un Maldeman, un astronauta de traje amarillo, pero realmente el que quería fue uno que sacaron de Superman, y que ahora entiendo, que por la época en la que debí pedir el mio ya debía estar más que descatalogado.

2 comentarios:

  1. Buen articulo.
    Battle Cat,Buttercup...😋

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    1. Si XD por aquella época siempre me recordaba a eso hasta que me enteré de cómo se escribía Buttercup.

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